En este otoño-invierno hay que tener en cuenta las tendencias pero, como digo siempre, adaptándolas a nuestro estilo y personalidad y aceptando algunas sugerencias concretas.
Hay que tener al menos una prenda escocesa, puede ser un pantalón, una camisa o un aplique en algún abrigo, también se impone con fuerza el azul y el rosa en los sacos, el simil cuero, lo mismo que las inscripciones en las remeras que hoy son infaltables.
Los sacos de paño se usan mucho a la rodilla y vienen en color negro (clásico), rojo y rosa ( para quien se anime); se les puede colocar para darle un toque más femenino un cuello de piel sintética queda muy elegante. Se usan mucho también los abrigos imitación leopardo y los chalecos de pelo largo. Si tenemos frío le agregamos un cuello tejido o una bufanda con colores engamados.
Siguen las leggins (calzas) pero siempre usándolas con una camisa o sweaters que tape lo que no queremos mostrar.
Luego está el estilo bohemio que es el que a mí me gusta, vestidos largos o cortos (a la rodilla) con chaquetas de cuero ecológico con tachas y botas o borcegos y el look romántico agregando sweaters tejidos al crochet y puntillas.
Lo importante es ser auténtico y coherente con la imagen que queremos mostrar.
